INFLAMACION DEL TUBO DE EUSTAQUIO
La inflamación del tubo de Eustaquio puede causar molestias como presión en los oídos, pérdida temporal de la audición, dolor y sensación de oído tapado. Esta condición puede deberse a infecciones, alergias o cambios bruscos de presión. Las biofrecuencias han surgido como una terapia complementaria para ayudar a reducir la inflamación, mejorar el drenaje del oído medio y restablecer el equilibrio de presión en el sistema auditivo.



Cómo Usar el Audio Correctamente
Encuentra un lugar tranquilo. Relájate en un espacio sin interrupciones.
Usa auriculares. Esto permite una mejor absorción de las frecuencias.
Escucha el audio dos veces al día, preferiblemente en la mañana y antes de dormir.
Acompaña la terapia con técnicas de relajación. Respiraciones profundas y masajes en la zona auditiva pueden potenciar los efectos.
Mantén una buena hidratación. Beber suficiente agua favorece la eliminación de toxinas y mejora la circulación.
Sé constante. Los beneficios pueden sentirse progresivamente, por lo que se recomienda una práctica diaria o frecuente.
Beneficios del Uso de Biofrecuencias en la Inflamación del Tubo de Eustaquio
Reducción de la inflamación y el dolor en el oído.
Mejora en el drenaje del oído medio y la función del tubo de Eustaquio.
Alivio de la presión y la sensación de oído tapado.
Fortalecimiento de la respuesta inmunológica frente a infecciones.
Optimización del equilibrio bioenergético en el sistema auditivo.
Frecuencias Específicas para la Inflamación del Tubo de Eustaquio
A continuación, se detallan las frecuencias utilizadas en este enfoque y sus posibles beneficios:
465 Hz: Ayuda a reducir la inflamación y mejorar la circulación en la zona auditiva.
660 Hz: Favorece la relajación de los tejidos y el alivio de la presión en los oídos.
690 Hz: Contribuye a la regeneración celular y disminución de la irritación.
727 Hz: Estimula el sistema inmunológico y ayuda en la eliminación de infecciones.
727.5 Hz: Apoya el alivio del malestar en el oído medio y mejora la recuperación del equilibrio.
776 Hz: Promueve el drenaje adecuado del tubo de Eustaquio.
787 Hz: Contribuye a la reducción del dolor y la inflamación del sistema auditivo.
802 Hz: Optimiza la función bioenergética del oído interno y medio.
880 Hz: Mejora la homeostasis celular y fortalece la respuesta inmune en la zona afectada.
Advertencia
El uso de biofrecuencias es una terapia complementaria y no sustituye el tratamiento médico convencional. Se recomienda consultar con un profesional de la salud antes de iniciar cualquier terapia alternativa, especialmente en personas con afecciones auditivas crónicas o infecciones recurrentes.
Para un tratamiento integral de la inflamación del tubo de Eustaquio, es fundamental mantener una adecuada higiene auditiva, evitar cambios bruscos de presión y seguir las recomendaciones médicas.